Queridos amigos y lectores:
Si los MÉDICOS del Vaticano confirman que LA CURACIÓN DEL PARKINSON QUE AFECTABA AL PACIENTE CITADO EN EL SIGUIENTE ARTÍCULO, es científicamente inexplicable, el Beato Juan Pablo II será proclamado Santo próximamente.
Pero los así llamados "RACIONALISTAS", que solamente admiten los hechos "científicamente" demostrados, ignoran, tal vez, que el Papa cuenta con una "Pontificia Academia de Ciencias" que lo asesora, compuesta por 250 científicos de primera magnitud, de todos los credos y nacionalidades.
El Vaticano, obviamente, no admite "milagrerías", por eso cuenta con el asesoramiento de científicos.
Yo pregunto entonces a los racionalistas: ¿cómo explican estas curaciones portentosas? Porque esos hechos portentosos EXISTEN, de modo que la ciencia tendría que explicarlos, ya que la ciencia estudia la realidad. Y, si la ciencia no logra explicarlos ¿debemos negar la existencia de esos hechos?
¿O no reconocen autoridad a los científicos del Vaticano, sino solo a "ciertos científicos" que niegan, irracionalmente, los milagros?
Les recomiendo leer "La incógnita del hombre" del médico, ex-ateo, Alexis Carrel, Pemio Nóbel 1912, para ahondar en el tema, ya que un racionalista que recibió el premio Nóbel es más importante científicamente que los que no lo han recibido aún.
Hasta el día de hoy, jamás escuché ningún argumento serio de parte de ningún racionalista, para explicar "científicamente" los milagros.
Algunos, callan. Muchos recurren a burlas o hipótesis simplonas.
Para los creyentes, en cambio, los milagros constituyen una de las pruebas de la intervención divina en nuestras vidas.
Y los católicos exclamamos "¡Aleluya!", porque podremos aclamar diciendo, tal vez ya muy pronto: "SAN JUAN PABLO II, RUEGA POR NOSOTROS".
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