lunes, 2 de febrero de 2015

VA EN AUMENTO EL NÚMERO DE JUECES QUE SE PROSTITUYEN


Queridos amigos y lectores:


Con sumo dolor e impotencia vivimos a diario en el Paraguay, bochornosas situaciones referentes a nuestra ya agonizante justicia.

El escritor Nelson Aguilera, distinguido exalumno mío de la Facultad de Letras de la UNA, se encuentra soportando una inicua querella por supuesto delito de "plagio literario".
 

Se entiende por plagio literario el hecho de copiar alguna obra ajena y publicarla como propia.
Eso jamás lo ha hecho Nelson Aguilera, no solo por estar dotado de una enorme potencia creativa que le permite generar obras valiéndose de luces propias, sino por la honestidad y la rectitud de conducta que siempre lo han caracterizado.

Pero, así como en los partidos de fútbol, a veces el juez sanciona como "penal" una falta inexistente, así también ocurre en la vida humana: ciertos jueces, también a veces, imputan al inocente y absuelven al culpable. ¿Es o no es verdad lo que acabo de afirmar?

Esto ya no es novedad en Paraguay, porque la ciudadanía está al tanto, y con repugnancia, de esta peste que ha enfermado de muerte a nuestra justicia.
Casi a diario la prensa nos informa sobre casos inverosímiles que despiertan la ira y la indignación de este ya demasiado sufrido y "abusado" Pueblo.


El más reciente crimen, que clama justicia al Cielo, es el asesinato del periodista Pablo Medina, cuyos autores ya han sido identificados plenamente, pero ninguno de ellos ha sido tan siquiera detenido, sino que siguen gozando de muy buena salud en lo tocante a impunidad.

No me corresponde, obviamente, entrar en detalles acerca de la bochornosa causa contra Nelson Aguilera, llevada adelante a tambor batiente por la poetisa querellante Maria Eugenia Garay, hermana del Juez César Garay Zuccolillo, de la Suprema Corte, que se debe expedir sobre el particular.

Escritores y peritos literarios de muchos países y de renombre, se han hecho eco de esta lamentable situación del colega Nelson, y han demostrado que el mismo no ha cometido plagio de ninguna especie.
Pero los "intereses creados", moneda corriente en Paraguay, pueden más que la justicia. 

Los creadores de la serie televisiva "El túnel del tiempo", emitida en los años 70 por canal 9 Telvisión Cerro Coprá, debieran demandale entonces a la señora Garay, porque ella puso a su cuento el mismísimo nombre de la citada serie.

El túnel del tiempo (The time tunnel, en inglés), es una serie de televisión estadounidense de 30 episodios del género ciencia ficción.1 Se transmitió por primera vez entre el 9 de septiembre de 1966 y el 7 de abril de 1967.1 Irwin Allen fue el creador y productor del programa de TV.1 El tema de la serie trata de las aventuras de dos científicos que viajan a través del tiempo.(Wikipedia).

Copio más abajo una parte del denso y muy recomendado artículo de La Nación, de Argentina, cuyo enlace les facilito  al final de este trabajo.

Cordiales saludos:
Dr. Francisco Oliveira y Silva
PD. ¿Qué podemos hacer nosotros? Nada.
La impotencia ante los poderosos es absoluta.

Pero podemos colaborar con nuestro compatriota Nelson, renviando este artículo, para brindarle a la ciudadanía otro dato más acerca de nuestra gravísima situación jurídica.
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Este es el artículo de La Nación
Sábado 31 de enero de 2015 | Publicado en edición impresa
A fondo

Escribir en prisión: la literatura amenazada por la política

En Irán, Paraguay o Colombia, escribir literatura puede ser una actividad que entraña extremo peligro; los modos que el poder encuentra para silenciar las voces que molestan

Por Maria Elena Polack  | LA NACION

SE LEE EN UN PÁRRAFO:

¿Cuántos autores a lo largo de la historia han escrito y fantaseado con una máquina del tiempo? ¿Acaso hasta en el cine no ha sido un tema recurrente, con Volver al Futuro como film taquillero mundial? Muchos. Entre ellos, H.G. Wells. Aunque para la escritora paraguaya María Eugenia Garay Zucolillo, autora de Un viaje fantástico-El túnel del tiempo, su colega Nelson Aguilera ha efectuado un "plagio inteligente" en su obra infantil Karumbita, la patriota.

Hermana del ministro de la Corte Suprema de Justicia, César Garay Zucolillo, la escritora inició acciones legales y se convirtió en el primer caso de su país de un enfrentamiento de autores de estas características.
En Brasil, en 2014 hubo siete autores asesinados.

Nelson Aguilera fue condenado en primera instancia a dos años y medio de cárcel y aguarda que la Corte Suprema de una respuesta positiva a su apelación y evite así la temible cárcel de Tacumbú.

"El supuesto plagio no fue demostrado en absoluto. Los peritos de la otra parte fueron un contador y una profesora que jamás realizó una pericia de este tipo en su vida. Todo esto es suficiente razón para anular una sentencia vergonzosa que tan sólo demuestra el tráfico de influencia de la demandante, cuyo hermano es un ministro de la Corte", explica Aguilera a la nacion.

Aquí va el enlace para leer todo el artículo de La Nación
http://www.lanacion.com.ar/1764658-escribir-en-prision-la-literatura-amenazada-por-la-politica

Transcribo aquí lo que le escribí a mi amigo Nelson, y el comentario que hice al artículo de La Nación.
Querido amigo Nelson:

Con absoluta indignación he seguido esta causa inicua en la que te han metido los emisarios del "Mal" para desalentar tu enorme obra educativa.


He leído también el extenso artículo de la Nación, y he intentado poner allí mi comentario: lamentablemente no logré ese objetivo porque me pidieron tantos datos, y yo los puse, cosa que jamás hice, pero esta vez sí lo hice para apoyarte, pero no resultaba y no salía publicado.


Entonces decidí escribir un artículo, que normalmente lo leen varios centenares de personas, y allí insertar mi comentario, lo cual me parece más eficaz que ponerlo en un diario que no todos leen , menos aún los títulos referentes a la justicia, de la cual ya estamos decepcionados.
 
Este es el comentario que escribí debajo de uno de los excecrables comentarios del señor R. Caballero, marido de la demandante que dijo:
R_Caballero_A 08:10 31/01/2015
Aguilera comenzó plagiando a Manuelita la Tortuga de Ma Elena Walsh. La tradujo al guaranì como Karumbita la tortuga. Luego copió toda la trama de la obra original con pocos cambios cosmèticos. Tuvo toda la defensa necesaria, cuatro abogados y sus peritos le salieron en contra.El alegó que nunca leyó la obra original, pero los peritos arguyeron "intertexto" que indica que si la leyó y modificó. Santillana Paraguay publicó la obra sin siquiera enterarse que Ma Elena Walsh era escritora del mismo sello.


ESTO LE CONTESTÉ:

@R_Caballero_A  Señor Caballero: ni "señor" ni "caballero" es usted al pretender meterse en esta causa, ya que la querellante es esposa de usted, situación que lo pone a usted dentro de "las Generales de la ley".
 
 Además nuestra Suprema Corte de Justicia, caracterizada por vender "justicia", está en la mira de la ciudadanía indignada, por las increíbles fechorías cometidas por quienes debieran ser el espejo del honor y de la verdad. Por tal motivo sus integrantes, entre ellos el Juez Garay, están al borde del Juicio Político. 

Estas son situaciones muy graves que hacen que estos Jueces, entre ellos Garay, carezcan de la estatura moral para impartir justicia después de haberse vendido y prostituido como villanos a tantos esbirros. 

Para colmo el Juez Garay también está, en lo referente a esta causa, dentro de las "Generales de la ley" porque es hermano de la demandante.

En el Paraguay ya estamos hartos de la repugnante venalidad de tantos Magistrados, y seguimos aguardando que llegue el día en el que un paraguayo de verdad, que esté dispuesto a enaltecer a nuestro Pueblo, haga posible la realización de los augurios cantados por Carlos Miguel Jiménez en su poema "Mi Patria soñada"
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